​

 "Le hemos hecho presente al Ministro y a las autoridades de Educación nuestras aprehensiones y trabajaremos en los próximos días, junto con otros actores involucrados, como los consejos de rectores o agrupaciones de entidades de Educación Superior para buscar una propuesta que modifique las disposiciones transitorias", comentó el presidente de la CNA a la prensa al término de la cuenta pública que la comisión nacional de acreditación rindió el martes 10 de abril recién pasado.

"No estamos planteando modificar el cuerpo de la ley, sino los plazos considerados en las disposiciones transitorias, para que sean más acordes con las posibilidades que tiene el desarrollo actual del sistema"

Insistió en que se trata "sólo de plazos y algunas opciones que permitan que el país pueda mantener su posición en tratados internacionales de carácter bilateral, como lo que tiene que ver con la acreditación de carreras", que en tales acuerdos internacionales se exige sean acreditadas para que sus egresados puedan optar al reconocimiento de sus títulos en otros países.

"Las autoridades de Educación ya hicieron en el Parlamento ver esta situación. Pensamos trabajar intensamente en las próximas semanas para hacer viable un tránsito apropiado, sin estresar un sistema que ha costado construir", subrayó. 

Consultado por los periodistas respecto a la acogida que han tenido en el Mineduc sus planteamientos, se limitó a comentar "entendemos que la piscina está con agua".

"Acredítense ahora"

Respecto a las instituciones no acreditadas (fundamentalmente IP y CFT, pero también algunas universidades) el mensaje del Presidente de la CNA fue claro y conciso: "La propuesta nuestra es que se acrediten desde ya, para poder distribuirlas anualmente".

La CNA seguirá evaluando con los criterios actuales hasta que se formalicen los estándares que exige la nueva Ley.  "Los criterios y estándares nuevos estarán listos a fines de 2019, por eso nuestra propuesta es acreditar por el actual sistema a todos los que se presenten mientras no se cuente con estos nuevos instrumentos".

"El mensaje nuestro -aprovechando la presencia de tantos actores de la Educación Superior en nuestra Cuenta Pública- consiste fundamentalmente en invitarlos a que nos preparemos todos juntos para el cambio que viene, que es de tal envergadura, que -si no están detrás todos- será muy difícil que lo podamos enfrentar exitosamente".

"Este es un cambio que se aplica sobre un sistema que ya existe y que lleva 10 años de funcionamiento, con aciertos y errores, pero principalmente con gran aprendizaje mutuo. Es distinto a la Subsecretaría y la Superintendencia que se crean desde cero"